Cortar el bello no duele!

Ayer a mediodía, como siempre, me preparé para ir a trabajar, me vestí, me pinté y salí por la puerta de casa. Y hasta ayer, cada mediodía elegía cuidadosamente la ropa q iba a ponerme, incluyendo ropa interior. Albergaba la esperanza q uno de "mis chicos" pasara por la oficina, me recogiera, y quien sabe donde podíamos acabar.

Ayer fue algo diferente, salí de casa vestida, pintada pero no le di importancia a mi ropa interior. Primer error! Nunca des por segura una situación.

Ya delante del ordenador cual fue mi sorpresa cuando un amigo-tonteo-posible amante me manda un mensaje citándome para una cena esa misma noche. Lo primero q piensas en lo bien q te lo vas a pasar.

Luego ya empiezas a ponerte nerviosa. La cita... en mi casa.... dios! La cama sin hacer, medio armario tirado por la habitación, platos por lavar, el baño aun pendiente de limpiar...! ¿Q hago? En teoría salía tarde de trabajar y quería ducharme, tenia q prepararme para una noche q podía resultar sensiblemente predecible.

Por suerte mis horarios nunca han sido muy estables y me las puedo apañar bastante bien, así q aunque a él le dije de quedar tarde por mi jornada laboral, todas sabemos q necesitamos nuestras 2 horitas para arreglarnos.

Chicos, os aviso, no todo lo dejamos al azar....perdón, rectifico... nada lo dejamos al azar. La frase:

- Acabo de llegar del trabajo, me pillas con lo q llevaba puesto

Mentira!!! Pura mentira, anoche mentí como una bellaca. El conjunto de ropa interior estaba perfectamente estudiado, mis tejanos del trabajo no sufrieron una transformación hasta convertirse en un vestidito corto, y por supuesto la suavidad de mis piernas no es fruto de la casualidad.

Todo está perfectamente estudiado, somos mujeres, lo llevamos en la sangre.

Al chico ya hacía varios años q no le veía así q he de reconocer q recordaba levemente sus facciones. Cuando llamó al timbre abrí con curiosidad, y bueno...podía haber sido peor, no estaba mal. Vestía algo informal pero los tejanos me encantan en un chico, así q algo podríamos hacer.

A su favor diré q se curró una buena cena, incluso esta mañana aun he podido saborear las sobras q guardé en la nevera.

Bueno, imagino q los detalles de la cena, conversación y demás no las necesitáis, así q pasaremos directamente del postre al sofá donde ya vi q su tonteo de la cocina había empezado a coger fuerza, vamos, q él ya iba calentando motores desde q entró por la puerta y en el sofá ya puso la directa.

Con la excusa de un masaje fue bajando la camiseta, el sujetador y yo como chica q soy iba fingiendo ser lo suficientemente inocente como para no entender q estaba preparando el terreno.

Mi pregunta es ¿Por qué tendimos a afrontar las situaciones como si no entendiéramos lo q pasa a nuestro alrededor? Es evidente q sabemos lo q significa q un chico intente hacerte cosquillas, o bien vaya a buscar crema para ese masaje q tanto necesitas. Entonces, ¿a qué viene esa inocencia repentina? He llegado a la conclusión que es porque en el fondo nos fascina q estén por nosotras, q nos encandilen hasta q ya es muuuy evidente, q traten de seducirnos a cada momento.

El caso es q él se lo curró, y como premio...nos fuimos a la cama. Una vez allí solo era cuestión de ir quitando ropa. Eso sí, a oscuras, quería concentrarme en sus manos y su lengua (entre otras cosas) y la luz a mi parecer solo entorpece el sentido del tacto. Es como un ciego... sus otros sentidos se agudizan.
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEglOdOGu9LhrWtyQMaA_RTaYldzBPQnaGhivz4wUGYSMZlSl-B_HX1XBx908-gegPRMJXuFCG9jloja05zPKsYgBuZdpqwLvgirWDwbVHF2aF5HYiwe6NBVvGce_53Ej8yo1JCy9E15R5oc/s320/vello+p%C3%BAbico.jpg
Pues chicas... menos mal q me dio por apagar la luz por que en q momento pensaría yo de ir bajando con la lengua y recorrer su cuerpo? Lo único q encontré fue pelo, pelo y más pelo. No pido a un metrosexual pero si quieres q llegue a los huevos... q no sea con machete en mano. Cuando llega la temporada aquí se podan las copas de los árboles, pues aplicaros el cuento, de verdad q lo agradeceremos.

Ahí no queda la cosa...yo cachonda como iba, me disponía a poner el condón pa tirar pa' delante y no se le ocurre otra frase q:

- Yo estoy a punto, vamos q no aguantaré para q llegues tú. Es q me has puesto muy cachondo

Anda q si me lo llego a currar un poco más no se quita ni los pantalones

Bueno, mentalizada de q la cosa no podía durar mucho vamos a envestir... o eso esperaba por que...a veces el tamaño importa, importa al menos para q sepamos q ha entrado y ponernos en posición para el movimiento, pero esta vez supe q entró por que avisó, todo un detalle por su parte.

Y si, como él había pronosticado, 5 segundos después ya había terminado.

Todo hay q decirlo, él quiso seguir toqueteando y mimándome pero... hay momentos y tras varios traspiés a lo largo del polvo q hacen q las ganas se pierdan un poco, así q preferí unos mimos q me fueron muy bien

La valoración: no es el hombre de mi vida, aunque cocina bien, y es muy cariñoso, pero...me alegré cuando me dijo q había quedado para salir, no quería pasar la noche con él

Chicos recordad: afeitar algunas zonas de tu cuerpo no hace daño a nadie y la inocencia femenina no existe, sabemos lo q hacemos en todo momento aunque no lo parezca

4 comentarios:

S. dijo...

me parto de risa con tu blog jajaj

Anónimo dijo...

Soy chico, estoy enganchado a tu blog. Creo que debiste ser un poco más egoista.

Y bueno, si el tio es un poco listo, lo normal para una primera cita, es intentar quedar bien en la cama así que a él le diria... si eres eyaculador precoz, masturbate antes de salir, asi tardaras al menos 5 minutos.

Estos son los que destrozan las medias jejejeje.

Un saludo y sigue escribiendo, me parto de la risa en algunos casos y en otros me tienes enganchado.

F.J. dijo...

lastima xq he encontrado este blog tarde, xo tiens mi voto virtual! esto completamente de acuerdo con la inocencia, xo yo creo q es algo q se necesita, q va inherente con las personas, es como un ritual a seguir antes de...

Anónimo dijo...

La próxima vez le afeitas para que se enfríe un poco... y que apriete el culo para aguantarse...
Y afeitarse el bello, ¡escuece!... pero merece la pena...